Todavía se escuchan los aplausos que acompañan al equipo en los últimos segundos del partido. Intensidad y precisión durante 40 minutos. Uno de esos partidos de Futsal que no dan respiro. Eso ofrecieron Hebraica y Barracas el sábado por la noche en Pilar. Este, sin dudas, es el camino.
Cuando el resultado es aquel que esperás y por el cual trabajás, resulta difícil expresarlo en palabras, sino que se resume en sensaciones. Eso transmitió el equipo el sábado desde el inicio hasta el último segundo del partido. Así construyó una victoria de esas que sirven para creer.
Barracas llegó a Pilar con intenciones de estirar su recuperación pero Hebraica decidió, eligió, ir en busca del partido bien arriba. Así comenzó y se mantuvo todo el encuentro. El equipo salió con su quinteto conocido: Fede Arruguete en el arco, Mati y Gabi Edelstein, Pablo Pastor y su capitán, Ari Birencwaig. Por primera vez en el torneo, Nacho Cabral debió utilizar a todo su banco de suplentes.Ingresaron Facu Schusterman, Santi Escande, Juan Yoma, Pablo Vera, Fede Entenberg, Elio Guipponi, Diego Trezwik y Nico Kravetzky.
Los primeros 10 minutos del equipo pueden encontrarse dentro de las mejores producciones del año. Presión, concentrados y rápidos en ataque. Fede tapó una gran pelota que tenía destino de red y apenas un minuto después, Mati Edelstein gritó el primero por una asistencia perfecta de Facu Schusterman ante la salida de Quevedo. Otra vez Facu fue de los puntos altos del equipo. Hebraica pudo aumentar con una definición de Elio picando la pelota pero Barracas empató a menos de tres minutos para el final de la primera mitad. A falta de dos segundos en el reloj, el visitante tuvo una chance inmejorable a través de un contraataque pero la pelota se fue apenas afuera en el segundo palo.
En la parte complementaria, solo corrían 30 segundos, cuando Facu construyó uno de esos goles que no necesitan explicación: encaró de izquierda a derecha y definió para el 2-1, después de dejar rivales en el camino. Barracas empezó a mover más la pelota para generar los espacios, pero el conjunto de Pilar estaba en una noche casi perfecta en cuanto a no cometer errores. Ambos equipos tuvieron situaciones: un remate de Elio que se estrelló en el ángulo seguido de una pelota al travesaño después de una excelente jugada colectiva de Barracas. Nacho Cabral pidió minuto con poco mas de cinco minutos en el reloj. Segundos después de la reanudación, Fede debió salir por un choque con Elio en un cierre y Nico Kravetzky tuvo su debut oficial en la temporada. A falta de 3:46, Elio Guipponi recuperó en la mitad y definió abajo ante Quevedo para marcar el 3-1. Un gol muy festejado por toda la gente de Hebraica presente en el Medinath Israel. Nico tuvo buenas intervenciones y el equipo cerró un partido casi perfecto por donde se lo mire, incluso marcando arquero jugador los últimos ataques de Barracas.
Tercera victoria consecutiva para un equipo que deja todo en cada partido y entrenamiento y que de a poco está encontrando la tan ansiada y compleja regularidad. El Futsal se define en esos detalles que terminan siendo determinantes en el desarrollo del juego. De eso se trata todo esto. En aquella derrota con San Lorenzo de la segunda fecha la frase fue la misma, a pesar del resultado: este, mas que nunca, es el camino. El jueves será turno de enfrentar a River en La Ñata por el postergado de la quinta fecha. ¡Vamos Hebraica!