Hebraica visitó a Independiente en Villa Modelo por el postergado de la fecha 12 en un miércoles de mucha humedad que obligó a suspender varios partidos en la jornada. Con dos equipos con aspiraciones de lograr la clasificación a la Copa de Oro, se vivió un partido de mucha intensidad, tanto en juego como en actitud. El empate final dejó sensaciones encontradas en ambos conjuntos en un torneo donde ya parecen no existir pronósticos y todo puede pasar. ¡Vamos Hebraica!
Miércoles de futsal para Hebraica e Independiente por el postergado de la fecha suspendida debido a los amistosos de la Selección Argentina ante Francia. Con una cancha en buenas condiciones pese a la situación climática, el partido en Villa Modelo no dio respiro y terminó reflejando la paridad que se vive semana a semana en el campeonato.
Quinteto titular con Nico Kravetzky en el arco, Ari Birencwaig, Nico Lamas y Gabi y Mati Edelstein. Ingresaron Pablo Pastor, Lean Ataides, Santi Escande, Axel Perez y Tomi Giaconi. Completaron el banco Gonza Carballo y Lauti Franco.
El primer tiempo mostró a un Hebraica rápido en ataque y firme con la pelota. Tal es así que Mati Edelstien abrió el marcador tras un contraataque con Nico Lamas, quién lo asistió de gran manera para el 1-0. Independiente igualó las acciones apenas 4 minutos después y el empate no se modificó, más allá de varias situaciones por lado. Gabi Edelstein tuvo la más clara para desnivelar pero su remate pegó en el travesaño.
La etapa complementaria sufrió varias interrupciones, una de ellas por un fuerte choque entre el arquero del equipo local y Lean Ataides, que debió abandonar el campo de juego. Hebraica tuvo varios minutos con ocasiones como otro remate de Gabi Edelstein al palo y un disparo de Santi Escande al travesaño. Independiente reaccionó y llegó al 2-1 con una buena jugada colectiva y una aparición por el segundo palo, apenas a cinco minutos del final. El conjunto de Nacho Cabral sacó del medio y Nico Lamas asistió a Tomi Giaconi que definió con un gran remate para gritar el 2-2. Los últimos momentos del partido se vivieron con mucha intensidad en busca de un triunfo agónico por parte de ambos equipos, pero el resultado no se modificó.
Un empate que tendrá su verdadero análisis y valor dentro de algunos días cuando finalice la primera rueda del campeonato, pero que sirve para sumar en medio de un torneo que promete y parece que se definirá en la última jornada. El camino continuará el próximo domingo cuando Hebraica visite a San Lorenzo en Boedo y el martes en Nueva Estrella ante Ituzaingo por los 16vos de Copa Argentina. ¡Vamos Hebraica!
Por Ariel Edelstein.